“LOS SOCIALISTAS DEBEN ACLARARSE”

El último Pleno de la Diputación ha demostrado el talante del funcionamiento del PSOE en los distintos ámbitos territoriales en que actúa y de los socialistas en general.
El primero de los temas que se trataron fue la moción del PP para que se renueve el contrato de funcionamiento a la central nuclear de Garoña que presentaba el PP.
Esta moción será poyada por el PSOE en las Cortes de Castilla y León tal como manifiesta su hasta ahora Secretario Regional, Ángel Villalba. Pero curiosamente es rechazada por el PSOE provincial como manifiesta su Secretario Provincial, José Mª Jiménez.

El señor Jiménez y su partido se han metido ellos solitos en un lío político que suponemos les traerá consecuencias.

Los cambios de postura en el PSOE son frecuentes. Lo hacen de una legislatura a otra, dicen una cosa en unos territorios y su contrario en otros. Es lo típico cuando se carece de un proyecto político claro y se pretende rentabilizar en votos que les dé el poder.

El PSOE estatal ha pasado de defender la moratoria nuclear, a pedir el cierre de las centrales obsoletas, hasta la reciente de aceptar lo que diga Europa.
El PSOE regional se ha movido en esos parámetros pero ahora pidiendo que no se cierre Garoña porque el programa último del PSOE estatal se plantea retomar esta energía (probablemente influido por una UGT con Cándido Méndez, acérrima defensora en los últimos meses de las nucleares tal como dijo hace unos días en Burgos).

PSOE provincial y José Mª Jiménez parece que no se enteran y les pilla con el pie cambiado. Históricamente y contra su partido estatal han defendido la pervivencia de Garoña sobre todo porque históricos afiliados de Las Merindades al PSOE están relacionados con la central. Y ahora dicen que no apoya este planteamiento, que incluso en periodos electorales defendieron con énfasis aunque les hacía perder votos y por el que llegaron a enfrentarse a sus compañeros alaveses.

Garoña es una central vieja y obsoleta tecnológicamente que desde hace años ha pasado su vida útil con graves averías irresolubles en la vasija del reactor y en los conductos hasta la piscina que enfría los residuos. Y eso no lo arreglan ni las inversiones en seguridad o en mejorarlas tecnologías.

La energía nuclear es contaminante y peligrosa, con elementos radiactivos muy activos durante miles de años. No es renovable ya que hay que importar uranio, que se extinguirá y que hay que enriquecer, lo cual no es barato. Deja residuos que duran miles de años sin que haya tecnología que los mantenga aislados hasta la desaparición de sus efectos, ni hay suelo que los contengan durante miles de años. Es peligrosa como se vieron sus efectos en Hiroshima y Nagasaki, la isla de Man, o en Chernobil, o en las recientes guerras del Golfo o Yugoslavia y recientemente en Aso-Valdellós (con un accidente nivel 2 que ha contaminado al menos a 800 personas).

Y por eso, o se quiere ese modelo energético que dejará una terrible herencia a las generaciones futuras, o se buscan modelos energéticos claramente alternativos al petróleo-gas, carbón y uranio, con recursos naturales limpios, inagotables y seguros. Afortunadamente nuestro estado es privilegiado para desarrollar la energía solar, eólica o hidráulica y por allí es por donde hay que investigar, profundizar y desarrollar nuestro modelo energético como ya han aplicado grandes empresas burgalesas como UBISA.

Por otro lado el P.C.E. anima al PSOE burgalés para que siga en esta línea, que no pegue más bandazos ahora que parece entender que Garoña hay que cerrarla y que hay que hacen mientras un plan alternativo socioeconómico y energético para Las Merindades, como llevamos reclamando desde 1980 cuando decidimos abandonar la defensa de la energía nuclear. Porque en caso contrario, el PSOE demuestra que se mueve por intereses de poder y no por el bienestar de los ciudadanos ni por ética política e higiene en el ejercicio de la política. En ese caso, el señor Jiménez y su dirección política provincial deberían dimitir.

Respecto al otro asunto tratado en la institución provincial, el del cheque-bebé, entendemos que el PP y PSOE se pusieron de acuerdo y ahora completan esa unidad en el tema al iniciar un reglamento para su aplicación.

Desde el P.C.E. rechazamos estas medidas políticas meramente cosméticas. Fomentar la natalidad en los pueblos es deseable y lógico, pero dando cheques no se logra y mucho menos que esos niños nacidos luego se quedan en el ámbito rural. Más bien sigue sucediendo todo lo contrario. Hay que hacer buenos planes socioeconómicos de desarrollo económico de los pueblos. Desde el P.C.E. ya hicimos públicas nuestras objeciones y planteamos nuestras propuestas al plan de dinamización económica que aprobó la Diputación hace unos meses y que presentó la señora Aparicio diputada de Planes Provinciales.

Ese es el camino y si quiere el PP provincial abrir mesas en este sentido, estaremos dispuestos a debatir planes y políticas concretas, porque como ya hemos dicho, algunas ideas podemos aportar. Es obvio que desde cualquier posicionamiento político e ideológico a todos los partidos, sindicatos y asociaciones nos preocupa la despoblación rural y su retroceso económico.

Comité Provincial del PCCL-PCE.
Burgos.